Las mejores calas familiares en Menorca
Las Baleares parecen tener un tipo de turismo especifico para cada una de sus islas. Por un lado tenemos a los jóvenes con ganas de fiesta en las discotecas de Ibiza, las familias con bebés en busca de tranquilidad escogen Menorca, las parejas sin niños prefieren perderse por Formentera y las familias con chavales ya un poco mayores se decantan por la diversidad de Mallorca. Obviamente no todo es blanco y negro, pero si tuviera que elegir un destino para encontrar calas familiares y tranquilas en las Baleares me decanto por Menorca.
Destinos como Ciutadella o Mahón no parecen muy dispuestas a evolucionar y cambiar su ritmo lento por el ajetreo turístico. Efectivamente, sorprende llegar a un lugar tan turístico y encontrar una modesta oferta de locales y restaurantes. Que siga así. Especialmente si llegáis a Menorca antes de San Juan o durante el mes de septiembre disfrutaréis de las mejores calas con total tranquilidad.
Las distancias en Menorca son cortas y en apenas 50 kilómetros y 45 minutos en coche seréis capaces de cruzar la isla de este a oeste. Al sur os queda un sinfín de calas donde la arena es blanca y fina, las aguas cristalinas y existe un buen número de playas con todo tipo de facilidades. Al norte os espera una costa algo más rocosa, el viento ha cincelado durante siglos un perfil más salvaje; si queréis que no os encuentre nadie, si buscáis vuestra cala perdida, el norte de Menorca es el lugar donde encontrarla.
A continuación vamos a repasar alguna de nuestras calas favoritas en Menorca para ir en familia. Nosotros realizamos el viaje alquilando un coche y con un bebé de ocho meses. Nos compramos un parasol en la misma isla y habitualmente nos preparábamos un pícnic para pasar unas horas en la playa -no muchas, por el bebé- relajados en la sombra y descubriendo el mar a través de los ojos de un bebé que lo contempla por primera vez a escasos centímetros del suelo. En la mayoría de casos nos movemos por la zona sur de la isla ya que la infraestructura es mucho más amable para poder desplazarnos con niños y encontramos todo tipo de facilidades como duchas, restaurantes, hamacas en alquiler y aparcamiento a pie de cala.
Cala Galdana
Probablemente se trata de nuestra cala favorita en Menorca para ir en familia. A medio camino entre Mahón y Ciutadella, en la zona sur de la isla se despliega esta espléndida cala de gran tamaño. Los pinos cercanos a la arena ofrecen una sombra perfecta y los acantilados alrededor de la playa descubren un escenario idílico capaz de competir con algún enclave tailandés o caribeño. Es, sin lugar a dudas, una de las playas más extensas de la isla. Entre sus visitantes abundan las familias aunque es uno de esos lugares que fácilmente enamora a cualquiera.
Facilidades: aparcamiento muy cercano a la playa. Alquiler de tumbonas y parasoles. Varios restaurantes y hoteles alrededor de la playa.
Cala de Santo Tomás
En la población de Migjorn, a pocos kilómetros al oeste de Cala Galdana se extiende la larga playa de Santo Tomás. Los pinos y algunas dunas de arena separan los complejos turísticos -especialmente dedicados al público inglés- de las tranquilas aguas del lugar. El estilo de la playa es familiar, la mayoría de sus visitantes proceden de los mismos complejos que se alzan alrededor. Las aguas, como en la mayoría de las calas del sur de Menorca, son cristalinas y transparentes, ideales para sumergirse y quitarse el dolor de cabeza de los días laborables que hemos dejado atrás.
Facilidades: aparcamiento a pie de playa, varios complejos turísticos a pocos metros de la playa con restaurantes, alquiler de tumbonas, socorrista y varios chiringuitos en la misma playa.
Cala Turqueta
Mucha gente tiene la cala Turqueta de Menorca como su favorita y no es para menos. Su nombre ya releva el color de sus aguas que gracias a la fina arena convierte el mar en un manto turquesa. La cala se encuentra protegida por un manto de pinos ideales para cobijarnos en la sombra si así lo deseamos. El único inconveniente de cala Turqueta es que debemos caminar unos diez minutos desde el aparcamiento. Lo bueno siempre hay que buscarlo y trabajarlo. Eso sí, al ser una playa tan famosa conviene llegar a primera o última hora para encontrar lugar para aparcar el coche.
Facilidades: aparcamiento a diez minutos de la playa, socorrista, baños y un chiringuito, aunque en la zona del aparcamiento.
Cala En Porter
Muy cerquita de Mahón se despliega esta lengua de arena que corretea entre un acantilado con abundantes pinos. Aunque alrededor de la cala existen bastantes restaurantes y algunas edificaciones un tanto abusivas para algunos, la verdad es que esta cala permanece alejada del escenario urbano y ofrece preciosas vistas. La arena es fina y de tono claro. Las aguas son prácticamente transparentes y ofrecen un baño espléndido. A ambos lados de la cala podréis hacer esnórquel sobre las rocas y vislumbrar una buena cantidad de peces.
Facilidades: existe un aparcamiento muy cercano a la playa. Ofrecen alquiler de tumbonas y parasoles en la misma playa. Encontraréis unos cuantos restaurantes en los alrededores.
Cala Mesquida
Partiendo hacia el norte desde Mahón, en apenas siete kilómetros llegamos al pueblo de Mesquida donde una preciosa lengua de tierra despliega una hermosa cala que lleva el mismo nombre del pueblo. Un entorno verde, un perfil más agreste por la erosión del viento ofrece un escenario precioso y convierte cala Mesquida en una de las más bonitas de Menorca. Si evitáis los meses de julio y agosto apenas encontraréis gente en esta cala y su escasa infraestructura no es tan family friendly como las otras calas que os contamos en el artículo.
Facilidades: solamente vais a encontrar un extenso aparcamiento y un pequeño chiringuito. Nada más. Por tanto, si vais con niños es conveniente que os llevéis comida, bebida, parasol y todo lo que os haga falta. Tenéis el pueblo a un kilómetro o dos por lo que es una auténtica pereza realizar el viaje de un lado a otro a media visita.
Cala Alcaufar
La cala Alcaufar, también conocida como cala Xuroy, se halla a pocos kilómetros al sur de Mahón, en la urbanización de Alcaufar. Se trata de un antiguo muelle marinero y ofrece esa imagen idílica de piedra, arena, nudos y aguas transparentes. Esta cala es relativamente pequeña y ofrece poca infraestructura.
Facilidades: no existe un aparcamiento, sino la misma calle que llega a la entrada de la cala donde podréis aparcar a un lado u otro. Un restaurante que lleva el mismo nombre de la cala. Nada más.