Donde una vez descansaron los comandantes e ingenieros navales que construyeron la Armada Invencible, hoy puedes dormirte escuchando el murmullo del mar y el tintineo de los mástiles y ver el sol amanecer sobre la Ría de Ferrol. La historia no se visita, se habita
La casa es acogedora, espaciosa y perfectamente adaptada para una familia grande o grupos de amigos.
Cuenta con un enorme salón comedor con un ventanal a lo largo de toda la fachada desde el que se tienen fabulosas vistas en contínuo cambio de luz, de marea, de color a la Ría de Ferrol, a la pequeña Marina y Playa de la Graña. Nunca te agotarás de mirar.
Tiene tres habitaciones dobles en la planta superior y un espacio para cuatro personas en la planta baja, con baño, TV, sofá y un pequeño balcón con mesa y sillas para desayunar o tomar un café o simplemente mirar al mar.
Los días soleados se puede comer en la terraza, o tomar una copa en su mobiliario de jardín y sombrilla, incluso hacer una barbacoa.
Desde la terraza se accede a la playa, donde se puede ir en 10 pasos con las sillas, juegos y sombrillas de playa a disposición.
Está en un pequeño barrio marinero de Ferrol, A Graña, que siendo tranquilo para los mayores, ofrece una inmensa cantidad de actividades para los más pequeños, pudiendo estar en la plaza, en la playa o en el muelle jugando a su aire y siendo controlados por los mayores desde la ventana o la terraza.
Su ubicación le permite desde quedarse en la misma Graña disfrutando de la "activa tranquilidad" (parece que no pase nada y en cambio contínuamente suceden distracciones: gente que va a pescar choco en el muelle, a marisquear en busca de alguna almeja en la arena, veleros y chalanas que entran o salen del pequeño puerto deportivo, barcos mercantes que entran lentamente en la ría haciendo sonar sus sirenas, barcos militares que entran y salen de la Base Naval de la Marina y mil etc, hasta ir a dar un paseo a Ferrol o jugar a exploradores por los acantilados y arenales que salpican toda la costa, yendo de faro en faro, de castillo en castillo.
Las playas de Ferrol, famosas por su belleza salvaje, ofrecen largas caminatas en marea baja, baños estimulantes y sesiones de surf en Doniños, Valdoviño o Pantín.
El entorno natural tanto marino como de interior ofrece un sinfín de paisajes desde faros y acantilados a cascadas y bosques encantados con monasterios medievales y parques naturales.
Nuestras amigas de Ferroltur os pueden guiar por la intensa historia de Ferrol, su conjunto de castillos y baterías candidato a Patrimonio de la Humanidad, sus astilleros en funcionamiento y visitables, su barrio de A Magdalena, pionero de la Ilustración, sus casas modernistas, sus museos de la Construcción Naval… y por sus incontables tabernas donde degustar las mejores raciones de productos tanto del Mar como de la tierra, y los mejores vinos.
En apenas una hora en coche se puede visitar la medieval Santiago de Compostela, la vibrante Coruña, Lugo y sus murallas romanas, o más cerca los pueblos con mucho encanto de Betanzos, Pontedeume, Mugardos y Redes.
Sea cuál sea su ideal de vacaciones, la Pousada do Mar ni Ferrol y sus alrededores les defraudará!